RANNY, la elefanta más vieja del DF, se accidentó en su espacio del zoológico de Chapultepec, víctima de su avanzada edad -dice el parte médico- y a su propia imprudencia -dice el parte de los encargados del zoológico.
Sin embargo, la revista del carajo pudo saber que no se trató de un accidente, como tratan de hacernos creer. En realidad, Ranny fue víctima de un atentado cometido a plena vista de los visitantes en uno de los días de mayor afluencia. El elefanticidio fue cometido por el abuelito del Chapo Guzmán, quien se halla de cacería por estos lares en compañía de su ahora más afamado nieto. Luego de cometida su "hazaña", ambos se fueron a comer sendas milanesas tamaño "orejas de elefante".
El infame cazador fue fotografiado vanagloriándose de su "proeza". Pero a pesar de todas las pruebas, el gobernante de la ciudad dice que el Chapo nunca ha pisado tierras chilangas ni las pisará otra vez. ¡Otro crimen que quedará impune, carajo!
García+
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