domingo, 5 de octubre de 2008

Gastos e inversiones



Un espurio que se encabrona con un chamaco que le grita sus cosas, y un legítimo que cita a conferencia de prensa para festejar tal asunto. ¡Puta madre! En tanto uno se divierte jugando a ser generalito y otro se prueba bandas y sillas presidenciales, los bravucones tricolores se disfrazan de dulces hermanitas de la caridad y presentan a la mesa directiva de la cámara de diputados una iniciativa de reforma a la Ley General de las Personas con Discapacidad, con miras a “reconocer los derechos de todos, de acuerdo con sus aptitudes físicas”. (“Mírenme, ya soy socialdemócrata, yuju.”). Los partiditos también andan atareados en sus propias rapiñas, algunos más mediáticos que otros y unos escondiéndose (Luis Maldonado de Convergencia). Y mientras tanto los malosos, legales e ilegales (acaso son los mismos), se ocupan ellos sí de cosas serias.

Las utilidades deben ser muy buenas si a pesar del incremento de riesgo para los capitales (calificación de riesgo país) las inversiones en infraestructura se incrementan. Si no, véase el caso del Proyecto Punta Colonet en Ensenada, BC (busquen en contralínea.com.mx). Los negocios no sólo están de a peso, sino de a millones de dólares, por eso la SCT ya extendió el plazo hasta el 26 de enero del 2009 para el registro de los posibles inversionistas pues algunos podrían haber quedado pobres-muy-pobres como Slim luego de la tormenta financiera. Además, existe la posibilidad de que el proyecto portuario sea entregado en su totalidad a la iniciativa privada para su desarrollo y administración, decisión que será tomada por Felipe Calderón Hinojosa en su calidad de presidente de la Comisión de Competitividad. Lo legal es lo legal.

A lo mejor la urgencia por incrementar el monto del PEF 2009 al área de seguridad tiene relación con cositas como esta: el Cuerpo de Fuerzas Especiales (CFES) del Ejército mexicano marchó durante el desfile del 16 de septiembre con al menos seis piezas de su nueva arma: la subametralladora Corner Shot Assault Pistol Rifle (CS-APR 5.56), de fabricación israelí. Lo fregón de esa arma es su cañón que puede doblarse a ambos lados para disparar al enemigo sin tener que apuntarle de frente, con lo cual evitan exponerse a disparos del contrario. Según información periodística, la empresa que produce y distribuye comercialmente este rifle, la Corner Shot Holdings LLC, se ubica en Miami, Florida, con filiales en Sudamérica, África, Medio Oriente y Norteamérica, y fue creada en 1995 por dos oficiales del Ejército de Israel que en ese año pasaron a retiro (¡bien Ricardos!). Su precio en el mercado oscila entre los 7 mil y los 8 mil dólares por cada pieza, a lo cual se deben sumar los equipos de video, audio, de apoyo técnico y de sistemas de cómputo que acompañan a cada arma y que van en un maletín con el que se mantiene intercomunicación con equipos de asalto. A infinidad de narco-policías-secuestradores-agentesdelaley se les ha hecho agua la boca (“¡Yo quiero uno!”, dirán). Y esas armas que mostró el ejército para espantar a los malos-malos, ¿ya los habrán pagado o los finiquitarán en 2009?

Lo dijo Ubaldo Díaz, el 29 de septiembre del 2008, en Crónica:

“Los partidos políticos siguen como botín para algunos dirigentes sin escrúpulos y los negocios no están exentos de la política. Uno de ellos es el senador por Convergencia y presidente de ese partido a nivel nacional, Luis Maldonado Venegas, al que se señala como beneficiario de jugosos negocios. El presidente de Convergencia fue acusado de obtener una jugosa recompensa con la adquisición del inmueble que alberga las oficinas del partido en el Distrito Federal, ubicado en la calle general Antonio León, colonia San Miguel Chapultepec.“Nos aseguran que las oficinas se adquirieron a un costo de cuatro millones ochocientos cincuenta mil pesos, cuando en realidad al propietario del inmueble se le pagó por ese concepto tres millones de pesos, lo que dejó una ganancia de un millón 850 mil pesos en la operación. Para evadir impuestos, Para evadir impuestos, Maldonado Venegas recurrió a una empresa fantasma denominada “Raúl Arenas Estrada y compañía”, con clave RFC RAE-050124-EKO, y con domicilio en Morones Prieto número 2805 de la ciudad de Monterrey, N.L., pero con cuenta bancaria en Guadalajara, Jalisco.” (¡Pillín!).

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