Para que no se nos aburran ahora que el Senado apruebe la reforma petrolera, el Peje y las adelaidas bien pueden ir pelando un montón de naranjas que sirva de parque para sus resorteras, porque el gobierno federal acaba de anunciar el programa de apoyo de empresas que cotizan en la BMV.
Y es que las sufridas y nacionalistas empresas que le apostaron a la fortaleza del peso hoy se ven sumidas en verdaderas deudas, no como las que tenemos los pobres jodidos como este servidor (no público) con la tarjeta de crédito o con los abonos chiquitos de Electra y similares.
Pero no es mucho. Por medio de Nacional Financiera (Nafin) y el Banco Nacional de Comercio Exterior, sólo se darán apoyos por un monto de 50 mil millones de pesos (eso dicen) durante el transcurso de un año. ¿Por qué ese lapso? Porque los vencimientos de certificados bursátiles de corto plazo (deudas) de las empresas para los próximos 12 meses ascienden a 78 mil millones de pesos.
Entre el miércoles y el viernes de esta semana se ofrecerán entre seis y siete mil millones de pesos, suficientes para garantizar los vencimientos en los que resta del año, que ascienden a unos 15 mil millones de pesos. Este “rescate de la liquidez” podría ascender hasta 100 mil millones, si las exigencias fueran mayores en las próximas semanas. Nomás hay que recordar que la deuda global de Cemex –de corto y largo plazo- asciende a unos cinco mil millones de ¡dólares!
Entretanto, este día el Banxico pone en subasta otros mil millones de dólares de las reservas internacionales.
Cierto, para nosotros simples mortales no habrá rescate.
Y es que las sufridas y nacionalistas empresas que le apostaron a la fortaleza del peso hoy se ven sumidas en verdaderas deudas, no como las que tenemos los pobres jodidos como este servidor (no público) con la tarjeta de crédito o con los abonos chiquitos de Electra y similares.
Pero no es mucho. Por medio de Nacional Financiera (Nafin) y el Banco Nacional de Comercio Exterior, sólo se darán apoyos por un monto de 50 mil millones de pesos (eso dicen) durante el transcurso de un año. ¿Por qué ese lapso? Porque los vencimientos de certificados bursátiles de corto plazo (deudas) de las empresas para los próximos 12 meses ascienden a 78 mil millones de pesos.
Entre el miércoles y el viernes de esta semana se ofrecerán entre seis y siete mil millones de pesos, suficientes para garantizar los vencimientos en los que resta del año, que ascienden a unos 15 mil millones de pesos. Este “rescate de la liquidez” podría ascender hasta 100 mil millones, si las exigencias fueran mayores en las próximas semanas. Nomás hay que recordar que la deuda global de Cemex –de corto y largo plazo- asciende a unos cinco mil millones de ¡dólares!
Entretanto, este día el Banxico pone en subasta otros mil millones de dólares de las reservas internacionales.
Cierto, para nosotros simples mortales no habrá rescate.
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